Para Navidades se hizo la típica sopa de galets y todas las sobras del caldo han sido para una digna manera de aprovecharlas haciendo croquetas. Las croquetas se pueden congelar sin problemas, antes o después de freírlas, así podremos comerlas cuando nos apetezca sin tener que esperar.
Ingredientes:
- los restos del cocido: pollo sin piel, morcillo, ...etc
- 1 cebolla grande
- 150 g de mantequilla
- 150 g de harina
- 1 litro de leche
- harina, pan rallado y huevo para rebozar
- sal y aceite de oliva
Preparación:
Fundir la mantequilla en una cazuela. Cuando se funda añadir la cebolla bien picada. Dejar sofreír a fuego lento hasta que se haga. Picar los restos del cocido y añadir a la cazuela. Cuando este hecha el picadillo, añadir la harina. Rehogar unos minutos y agregar la leche templada poco a poco. Sazonar con sal. Dejar cocer hasta que la masa de las croquetas se separe de las paredes de la cazuela, sin dejar de remover. Depositar la masa sobre una bandeja, tapar con film trasparente y dejar que se enfrié. Cuando la masa esté totalmente fría hacer las croquetas dándoles forma con las manos. Rebozar las croquetas para freírlas pasándolas por harina, huevo y pan rallado. Freírlas en abundante aceite bien caliente hasta que estén doradas por las dos partes.
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